Ayer viernes, estuvimos en la sala de Psicomotridad de nuestro colegio, con Nerea, María José y Úrsula, profesoras de el Conservatorio Elemental y Escuela Municipal de Música de Aller. Como sabéis colaboramos con la Escuela en varias actividades durante el curso. Con ellas hicimos actividades de juego, nos contaron un cuento de instrumentos y aprendimos lo importante que es el silencio en la composición musical. Pintamos en el suelo en papel continuo, tuvimos ocasión de hacer una audición con el tema de Leroy Anderson "El reloj sincopado", bailando y haciendo de relojes de cuco. Esta experiencia nos sirvió para experimentar la alegría de vivir la música en vivo (otra vez, igual que con Pop Piquiñin), de vivenciar todas las virtudes que tiene la expresión musical, y de recordar que tenemos una excelente Escuela de Música pública al ladito de casa. Una suerte en este mundo que olvida cada vez más las artes.
Gracias por este regalo de sensibilidad y amor por la música.
Hasta pronto. Seguiremos buscando la belleza.
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